El Diálogo

-En que piensas? 

-Eh? ... ah, en nada, tengo que llegar temprano al trabajo.

Fue la respuesta menos cuestionable en la que pude pensar. Como puedo explicar, cada vez que me hacen esa pregunta, que mi mundo se esta cayendo a pedazos, que cada vez que observo la escena frente a mi, la piel se eriza a la vista de ese mundo que ya no es el mio, siento el viento frío que me envuelve y los colores del cielo se caen en lluvias de luz que no son menos que sobrecogedoras. Como explicar que a pesar de eso el mundo toma una belleza extraordinaria, Tu tomas una belleza extraordinaria que me parece que es posible solamente gracias a los ojos de las cientos de vidas que he vivido.

-Estás bien?

-Por que?... yo siempre estoy bien.

Es la respuesta que todos quieren escuchar, por que termina rápido. Sabes... No, no creo estar bien. Es verdad que soy extremadamente feliz con lo que tengo... pero no es mio, por que yo no soy de aquí, yo soy del sueño, del mundo que no existe, del mundo en el que solo te conocí un día, un instante y fue suficiente, del mundo en el que caminaba solo entre calles oscuras y abandonadas. Sobre todo, del mundo en el que era héroe sin nombre y mi deseo de justicia era mayor que mi miedo.

-Que quieres?

-No sé, lo que tu quieras.

Será la respuesta que me librará de elegir. Por que dios me libre de elegir por que me eligiria a mi. Elegiria que lloraras con mis actos de bondad, que te conmovieras con mi desprendimiento por verte feliz, que aprendieras con las lecciones que te doy pero sobre todo eligiria que sufrieras! que sufrieras por mi sacrificio para salvarte, por la muerte heroica que tendría... 

Y una vez más lo siento, por que esto no es lo que ustedes quieren. No haré lo que ustedes quieren que haga, no viviré por la felicidad comprada... moriré por la felicidad espontanea.